El Cabildo de La Palma ha concedido una línea de ayuda de 33.832,78 euros al Ayuntamiento de Tijarafe para la instalación y puesta en funcionamiento de cinco zonas de compostaje comunitario en el municipio, como modelo de revalorización de residuos complementario a los sistemas de compostaje doméstico.
En concreto, estas zonas de compostaje comunitario se ubicarán en el barrio de Tinizara -en el entorno de la cancha-, en el barrio de Aguatavar -en la ubicación del futuro Mirador del Sol, junto al Restaurante La Muralla-, en El Pueblo – en la Urbanización El Rebollero-, en el barrio de El Jesús se ubicará en la Fuente del Toro y en La Punta, en la zona del Kiosco Fé y Alegría.
Con este proyecto, que se desarrollará a través de La Palma Orgánica, “se busca alcanzar la revalorización de residuos mediante una gestión participativa a la vez que se colabora en el cambio del modelo de gestión de residuos, estableciendo como pilar básico la reducción de residuos en origen”, indica Javier Peña, concejal de Servicios del Ayuntamiento de Tijarafe, quien, además, solicita la colaboración de los ciudadanos y ciudadanas para poder implementar este modelo de manera exitosa en el municipio.
La instalación de zonas de compostaje comunitario facilitará la labor técnica de los responsables municipales, dotando de la infraestructura y los equipos necesarios para un compostaje descentralizado viable y que mejore la gobernanza en la gestión de residuos del municipio, convirtiéndose en un modelo de gestión de residuos complementario a los sistemas de compostaje doméstico.
“Se contempla, además, informar a la población sobre el correcto reciclaje y separación de la fracción orgánica para las zonas de compostaje comunitario y reducir la cantidad de residuos depositados en los contenedores de la fracción resto”, señala Javier Peña.
EL COMPOSTAJE COMUNITARIO: UN PASO MÁS EN EL MODELO DE GESTIÓN DE RESIDUOS
El compostaje comunitario supone hacer compost de forma colectiva en un punto común, normalmente algún jardín, parque o espacio público cerca de los hogares. También es la opción elegida por una población implicada que quiere colaborar con las iniciativas locales o municipales.
El compostaje comunitario implica compartir un espacio, una actividad y el interés en colaborar con la conservación del medio ambiente más cercano. Que varias personas se involucren en un proyecto, con un beneficio general más que particular. La coordinación y seguimiento directo por parte de voluntarios o maestros compostadores, etc. son aspectos que otorgan al compostaje comunitario un valor añadido frente al doméstico.
La Palma Orgánica es la encargada de poner en marcha este programa de compostaje comunitario en la Isla, logrando el máximo consenso entre las administraciones locales, los gestores de residuos y los vecinos y vecinas, de forma que se alcance una gestión lo más armónica, coordinada, cooperativa e integrada posible.
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