En el día de ayer, concluían los trabajos de mantenimiento y limpieza del retablo mayor que constituye una de las principales piezas artísticas del Bien de Interés Cultural de la Iglesia de Ntra. Sra. de Candelaria, en Tijarafe. Dichos trabajos han sido llevados a cabo, a lo largo de esta semana, por la restauradora Isabel Concepción, técnica de la unidad de restauración de pintura y escultura del Cabildo Insular de La Palma, dependiente de la consejera Susa Armas, titular del área de Cultura y Patrimonio, sin cuya colaboración, junto con la del propio Ayuntamiento de Tijarafe, no se hubiera podido desarrollar esta puesta a punto.
Fechado en la primera mitad del siglo XVII, cabe recordar que el mencionado retablo es obra del reconocido escultor y dorador nacido en Puebla de los Ángeles (Mexico), hijo de padres españoles, Antonio de Orbarán. De gran valor e interés artístico, es uno de los pocos ejemplos conservados en el Archipiélago que muestran una idiosincrasia arquitectónica de cinco calles. La originalidad de este retablo estriba en la fórmula seguida por Orbarán al situar en los intercolumnios o entrecalles todo el muestrario escultórico de un extraordinario apostolado, con lo que adquiere prácticamente la apariencia de once calles. El retablo construido por el de Puebla fue uno de los primeros trabajos que le fueron encargados poco después de haber llegado al Archipiélago, de manera que permite tomarlo como referencia para entender el rumbo y características del retablo novohispano de aquellos años.
Así mismo, aprovechando la visita de la restauradora Isabel Concepción, se hizo entrega nuevamente a la parroquia de la candela original, de madera policromada, de la imagen de la patrona del municipio, Ntra. Sra. la Virgen de Candelaria. Dicha candela ha sido restaurada recientemente en el taller de restauración de pintura y escultura del Cabildo de La Palma. Se encontraba en estado crítico, con pérdida importante de policromía y del dorado de pan de oro. Encontrándose también un abundante repinte que cubría la policromía original.
Isabel Concepción abunda sobre los procesos aplicados en la antigua candela, “el tratamiento consistió en consolidación de policromía y pan de oro; retirada del repinte; estucado de las lagunas; reintegración cromática de la capa de oro y de la corla; así como su protección general final”. Respecto al retablo, la restauradora recuerda que “resulta fundamental realizar las preceptivas labores de mantenimiento y limpieza en esta magnífica y singular obra del barroco canario.”
Para Marcos Lorenzo, alcalde de Tijarafe y responsable del área de Patrimonio, “el retablo mayor del templo de Candelaria es todo un emblema para los tijaraferos, además de ser una verdadera joya de nuestro patrimonio y por ello merece toda nuestra atención y cuidado. Además, nuestro retablo, sobre el cual se ejecutó una profunda restauración hace ya más de 20 años, va a tener un papel destacado en la temática de nuestras próximas fiestas patronales. Así mismo, volver a contar con la candela original de nuestra querida Virgen de Candelaria justo en estos días que se acercan sus fiestas supone un motivo extra de celebración”.